Hay tanto que decir sobre Angela… aquí les presento un extracto y el resto lo conversaremos en el club de lectura.
Vigente hasta el día de hoy, nacida en 1944 en EE.UU., es una de las mayores representantes del feminismo antirracista. A los 14 años fue becada para estudiar en Nueva York, donde conoció el marxismo y se unió a organizaciones de este carácter, creando lazos con otros jóvenes que tenían ideas de cambio y revolución. Así se convirtió en una de las figuras del movimiento por la lucha de los derechos civiles. Ella perteneció al lado menos armado de las Panteras Negras.
En 1969 fu expulsada de su puesto de profesora de filosofía en la UCLA, por pertenecer al Partido Comunista. Luego, fue acusada de haber contrabandeado un arma encontrada en un homicidio al interior de una cárcel y ella se dio a la fuga. Fue decretada una de las criminales más buscadas por el FBI y en sus memorias, hace referencia a cómo usar pelucas la hacía pasar completamente desapercibida frente al resto de las personas. Aquí fue cuando comenzó a darse cuenta de la fuerza de su imagen con su cabello natural.
Cuando fue arrestada, pasó 16 meses en la cárcel para ser declarada inocente en 1972.
Su imagen causó controversia al no corresponder con lo que se creía, debía verse como una marxista revolucionaria; además de su formación intelectual, se le describe dulce y con gracia, más parecida a un artista que a un político. Muy alta (casi 1.80m) con su cabello al natural que le da más altura, sus faldas de corte A, pañuelos de seda y beatles.
Como impacto de su imagen, muchas mujeres dejaron de alisarse el cabello, lo que significó que dejaron de seguir los cánones de belleza impuestos por blancos. El Afro siempre ha existido en la comunidad, pero el significado de liberación lo adquirió después; fue por la actitud, fuerza y empoderamiento que transmitían sus peinados libres y rebeldes.
En su biografía, Angela menciona que no quiere ser recordada sólo como un peinado. Ese texto leeremos para la primera sesión del club de lectura.
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